Una iniciativa ejemplar, un camino hacia el residuo plástico zero que no te dejará indiferente
Vivir sin plástico es un blog que nació en el verano de 2015 como una iniciativa particular de dos personas para reducir el impacto medioambiental, y que hoy se está convirtiendo en un blog referente en el sector ecolifestyle. Sus autores, Patri y Fer, se propusieron hace ahora casi un año reducir su residuo plástico a 0, y en su blog nos explican su evolución en esta ejemplar azaña.
Además de contarnos con detalle su día a día en el propósito de vivir sin plástico, nos dan buenos consejos sobre cómo eliminar el plástico de nuestras vidas, y nos ofrecen opciones muy interesantes como la compra a granel (con muy buenas referencias) o excelentes alternativas al film de plástico que usamos en la cocina para la conservación de alimentos, entre muchos otros.
Entrevista a los autores del blog vivirsinplastico.com
No perdáis detalle de esta entrevista porque no os dejará indiferentes. ¿Habéis pensado alguna vez en vuestro residuo plástico? Hace falta detenerse a pensarlo para darse cuenta del montón de residuo que producimos, y para más gravedad, la mayoría no hacemos lo que está en nuestra mano para reducirlo, o al menos, para gestionar mejor su reciclado.
¡Esperamos que os inspire tanto como a nosotr@s!
1.¿Cómo era vuestra rutina de reciclaje antes de empezar este proyecto?
La verdad es que nos considerábamos buenos recicladores. Reutilizábamos las bolsas del supermercado para tirar la basura y sacar los envases a reciclar, separábamos por categorías todos residuos (vidrio, envases, papel y orgánico) y los poníamos en el contenedor correspondiente. Si pecábamos de algo era de poner en el reciclaje cosas que no estábamos seguros si se podían reciclar, pero ante la duda…
Aunque a veces, cuando estábamos fuera, alguna cosilla se nos iba de las manos. En la ciudad donde vivimos hay barrios que sólo sacan el contenedor del reciclaje unos días concretos de la semana por la noche, así que si estábamos de paso, o nos llevábamos los envases para reciclar a casa o, si eran muy grandes, los acabábamos tirando a una papelera, lo que alguna vez nos pasó.
Aún así no nos sentíamos bien reciclando, cada vez que tirábamos los envases a reciclar pensábamos que estábamos produciendo demasiados residuos y tampoco estábamos muy seguros de que todos se pudieran reciclar.
Yo, Fer, trabajé durante unos años en una tienda de alimentación natural en Londres y gestioné por un tiempo el reciclaje de los residuos. Reciclar el plástico era muy costoso y además exigían que estuviera completamente limpio. Fue imposible encontrar alguien que reciclase los tetra packs al ritmo que se desechaban. Por lo que sabía que reciclar el plástico es muy complicado.
Aún así, sacábamos nuestras bolsas intentando pensar que estábamos haciendo todo lo que estaba en nuestras manos, que después ya era cosa de otros.
2.¿Cuál ha sido vuestro mejor y peor momento durante este propósito?
La verdad es que no ha habido un momento concreto, hemos pasado muchos buenos y alguno malo. Por ejemplo, nos hizo mucha ilusión la primera semana que no tuvimos ningún plástico, porque vimos cómo se hacía realidad lo que en un principio nos parecía prácticamente imposible. Nos sentimos como “héroes”.
Otro momento especial fue cuando publicamos el mapa de tiendas a granel y la gente empezó a escribirnos hablándonos de tiendas que nos faltaban y nos dimos cuenta de que hay muchos más establecimientos con productos a granel de los que nos imaginábamos.
Y uno de los malos momentos fue en otoño del año pasado. Fuimos a una playa a la que vamos a menudo y la encontramos completamente llena de basura. Kilómetros y kilómetros de playa llena de residuos (plásticos en su gran mayoría). La semana anterior había habido fuertes tormentas y el mar había escupido parte de lo que tiene en su interior. Y, como estábamos fuera de temporada, el ayuntamiento no se preocupó de limpiarla. Es terrible comprobar lo contaminados que están nuestros mares, y ver en un entorno tan natural lo que estás intentando evitar en tu día a día.
Otros momentos malos son cuando necesitamos algo que viene en plástico y no podemos conseguirlo. Hubo días, sobre todo al principio, en los que nos parecía que la lucha contra el plástico era una batalla perdida.
3.¿Qué consejos nos daríais para gestionar mejor los residuos plásticos en casa?
Lo más importante es ser consciente del uso que estamos haciendo del plástico. El plástico desechable está tan metido en nuestra vida diaria que lo normal es pedir bolsas en el supermercado, tomar café en tazas desechables y comprar la comida envasada. Muchos de estos productos tienen una vida útil muy corta, de unos pocos minutos, pero están hechos de un material no biodegradable, concebido para durar siglos. Todo el plástico que se ha producido en los historia todavía sigue con nosotros, no le ha dado tiempo a degradarse. ¿No es muy fuerte esto? Hay que darse cuenta. Cuando muchas personas comprenden esto cambian su actitud.
Nosotros no creemos que reciclar sea la solución. La mayoría del plástico se recicla para producir productos que no van a poder reciclarse de nuevo. Por lo que, aunque se reciclase todo el plástico que se produce, seguiríamos necesitando material nuevo. Que nadie nos malinterprete, hay que reciclar, es fundamental, pero antes habría que intentar reducir el uso, buscar productos reutilizables o alternativas más sostenibles. Reciclar debería quedar como la última opción.
Siempre es bueno informarse del plástico que se puede reciclar y del que no, para que cuando vayamos a comprar evitar el no reciclable. Por ejemplo, los plásticos que llevan el símbolo con el número 7 no se pueden reciclar. Uno de los botes de champú que tenía Patri en el baño era del tipo 7. ¿No es absurdo hacer un envase de champú en un material no biodegradable y no reciclable?
Así que el mejor consejo que podemos dar es reducir, cuanto menos residuos tengamos más fáciles será gestionarlos.
4.¿Qué marcas son para vosotros un referente en cuanto al respeto medioambiental?
No tenemos muchos referentes, la gran mayoría de lo que compramos es a granel y lo bueno que tiene comprar así es que dejas de poner nombre y marca a los productos. Lo que no podemos comprar a granel, como el aceite, miramos que no vengan con plástico, que sean los más locales posible, pero nos da un poco igual la marca.
Una empresa que nos gusta como trabaja es 4eco, porque además de vender productos de limpieza ecológicos a granel, ellos mismos devuelven los tanques a fábrica para que los rellenen. Nos gusta saber que el plástico que no queremos en casa tampoco se queda en la tienda donde compramos.
5.¿Cómo ha sido vuestra compra esta semana? ¿Dónde habéis comprado y cómo lo habéis transportado?
Más o menos nuestra compra es igual todas las semanas, cuando nos hace falta (una vez al mes más o menos) vamos a una tienda a granel donde compramos los básicos: cereales, pasta, frutos secos, legumbres… Un poco menos a menudo vamos a otras tiendas a granel a comprar productos más difíciles de encontrar, como café, infusiones o especias.
Luego es cuestión de comprar hortalizas, frutas y verduras dos o tres veces por semana en una tienda cercana que ya conocen nuestras “manías”. También allí compramos algún tarro de legumbres ya preparadas y antojos que tengamos (chocolates, pesto, patés vegetales…). Y en una panadería del barrio compramos casi a diario, somos demasiado paneros, sin pan no somos nadie.
Ah, y muchos viernes vamos a que nos rellenen la growler (una garrafa de 2 litros rellenable) de cerveza artesanal.
Bueno, ahora vamos a responder a la pregunta: esta semana, de momento, solamente hemos ido un par de veces a la frutería a comprar sobre todo lechugas, tomates, aguacates (somos adictos) y fruta. A la panadería hemos bajado casi todos los días. Y ya está. Cargamos la compra en bolsas de tela y para la fruta también llevamos bolsitas de tela pequeñas y ligeras para no utilizar ninguna de plástico.
El pan solemos pedir que nos lo pongan en otra bolsa de tela que tenemos, pero la verdad es que a veces lo compramos en una bolsa de papel.
6.¿Qué le diríais a las personas que todavía no reciclan el plástico?
Hay muchas personas que no son conscientes (o no quieren serlo) de que el planeta no puede soportar este ritmo de consumo por mucho más tiempo. Cada vez somos más, consumimos más y los recursos son limitados. Estamos sacando material de una hucha que empieza a vaciarse y que no se puede volver a llenar. Además, producimos más basura de la que el planeta puede digerir. Estamos convirtiendo nuestro planeta en un estercolero. Cada año, 8 millones de toneladas de plástico acaban en el océano, lo que equivale vaciar un camión de basura en el océano cada minuto. Se calcula que para el 2050 habrá más plástico que peces en el océano.
Muchas veces los árboles no nos dejan ver el bosque. Debemos de tener una visión más global y comprender que somos parte de un planeta que tenemos que cuidar como si fuera nuestra casa, porque es lo que es.