Los protectores solares, además de proteger la piel de los rayos ultravioleta, también deben ser respetuosos con nuestra piel
Si encontrar una crema hidratante econatural a un precio razonable es complicado, todavía lo es más encontrar un protector solar saludable para la piel y para el bolsillo. Pero como los días ya invitan a pasar más tiempo bajo los rayos solares, es momento de tomar precauciones para proteger nuestra piel, sin renunciar al placer del sol.
Así que este año he hecho un pequeño “estudio de mercado” para intentar encontrar un protector solar en el que valiera la pena invertir un poco más de lo habitual (hasta ahora solía gastarme alrededor de los 12€/unidad). En este post os hablaré de mi conclusión al respecto.
Para la búsqueda, he aplicado estas premisas:
-Que proteja mi piel
-Que sea econatural y certificado por algún organismo oficial
-Que no sea excesivamente caro (máximo 20€)
-Que no sea demasiado graso ni “deje blanco”
Antes de hablaros de la marca que me ha parecido más interesante, lo primero que os quiero contar es que he descubierto que hay dos tipos de protectores solares: los químicos y los físicos.
¿Qué diferencia hay entre un protector solar químico y un protector solar físico?
En el caso de los protectores solares químicos, su mecanismo de protección pasa por absorber las radiaciones mediante reacciones químicas en la piel.
Para entenderlo mejor, cuando nos exponemos a la luz solar (compuesta de fotones, la unidad básica de los diferentes rayos solares, de los cuales debemos protegernos sobretodo de los ultravioleta), los filtros químicos se activan generando reacciones químicas que absorben y modifican los rayos para evitar quedaduras solares. Por ello, para que sean eficaces necesitan un tiempo de reacción y deben aplicarse al menos 20 minutos antes de la exposición al sol. Su ventaja es que son cremas más ligeras y no suelen “dejar blanco”.
Por el contrario, los protectores solares físicos son minerales (compuestos a base de óxido de titanio u óxido de zinc). Estos ingredientes actúan como pequeños espejos que reflejan los rayos solares, rebotando en la piel y aportando una protección muy eficaz. Al no penetrar en la piel ni provocar ninguna reacción química, son mucho más tolerados por las pieles sensibles. La desventaja es su textura, que suele ser más espesa, menos ligera en su aplicación y que dura menos, por lo que necesita que repitamos la aplicación con mayor frecuencia.
La utilización de uno u otro tipo va a depender de las necesidades de nuestra piel y de nuestras propias preferencias. Yo me he decantado por los filtros físicos, porque me parecen mucho más inocuos aunque yo no tenga problemas de piel.
Mi elección de protector solar por el momento
Después de haber buscado por internet y en diferentes tiendas aplicando los “filtros” que os he comentado al inicio del post, me he decantado concretamente por la Leche Solar Facial y Corporal SPF30 de Biosolis (EAN 5425001841851), por sus características, precio asequible y por los buenos comentarios que he podido leer al respecto. Y aunque su textura no es fluída, no deja sensación grasa ni la piel blanquecina:
Esta es su composición:
El 99% de los ingredientes totales son de origen natural.
El 51,2% de los ingredientes totales son orgánicos.
Ingredientes (INCI): Aloe Barbadensis gel *, Dicaprylyl Carbonate, Titanium Dioxide, Zinc Oxide, Propanediol, Polyglyceryl-2 Dipolyhydroxystearate, Pongamia Glabra (Karanja) Seed Oil*, Coconut Alkanes, Polyglyceryl-3 Diisostearate, Sodium Chloride, Brassica Campestris ( Rapeseed ) Oil *, Daucus Carota Sativa(Carrot)Root*Extract /Helianthus Annuus (Sunflower)Seed Oil*, Polyhydroxystearic Acid, Stearic Acid, Aluminium hydroxyde, Potassium Sorbate, Sodium Benzoate, Coco-Caprylate/Caprate, Aluminia, Parfum, Lactic Acid, Tocopherol
* ingredientes de cultivo biológico
Por lo que he visto en su web, Biosolis es un fabricante belga que elabora exclusivamente protectores solares organicos certificados, si queréis saber más podéis enlazar a su web aquí.
Su precio ronda los 21€ (100ml), aunque he encontrado un distribuidor de venta on-line donde lo venden bastante más barato (15,75€): www.carethy.es.
No son distribuidores exclusivos de productos econaturales, pero tienen productos interesantes a precios muy competitivos. Este distribuidor tiene su sede en Mataró (Barelona), y entrega sin costes de transporte adicionales a partir de los 49€ dentro de la península. Es la primera vez que hago un pedido aquí, mi experiencia es que el plazo de entrega es excesivo (10 días).
Como siempre, espero que esta información os sea útil y os sirva en vuestras futuras compras. Si probáis este producto no dudéis en comentar aquí vuestras opiniones. Y ya sabéis, a disfrutar del sol con cabeza!