Diferentes medios como El País se hacen eco de la noticia que el Gobierno ultima un real decreto que pretende reducir la contaminación por estos residuos e incentivar la compra a granel a partir del año 2023. Es una medida prevista en el borrador del real decreto de envases y residuos en el que está trabajando el Ministerio de Transición Ecológica. El objetivo de la próxima norma es reducir los envases contaminantes de un solo uso y fomentar la compra a granel y el uso de envases retornables.
Volver a la compra a granel
Después que las bolsas de plástico tradicionales de los súpers hayan sido sustituidas por bolsas de papel o reutilizables, el siguiente paso es que en las tiendas y los supermercados de España no esté permitido vender fruta y verdura en envases de plástico. La prohibición está pensada para los envases de menos de 1,5 kg, con el objetivo de combatir de la manera más eficaz la sobreutilización de envases de plástico, debido a que su contaminación es ya demasiado elevada.
Quedarían exentos los envases de aquellos alimentos con riesgo de deterioro cuando se venden a granel, en una lista que elaborará la AESAN (Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición).
Envases reutilizables
Entre los objetivos generales del real decreto, se establece como meta lograr una reducción del 50% de la venta de botellas de plástico para bebidas en 2030. Y se marca que para finales de esta década se logre que el 100% de los envases que se pongan en el mercado sean reciclables.
Para los comercios minoristas, el Gobierno prevé medidas para que promocionen la venta a granel de productos frescos sin envase. Estos establecimientos, por ejemplo, deberán permitir a los clientes que lleven sus propios recipientes reutilizables para que sean rellenados, aunque se establecerán unas condiciones de limpieza e idoneidad por parte de los comercios.
Por otro lado, uno de los puntos destacables tanto de este real decreto como de la ley de residuos que se está tramitando en el Congreso de los Diputados es la de la puesta en marcha de un sistema de depósito, devolución y retorno de envases, como existe en algunos países de la Unión Europea.
Esto se alinia con la estrategia para la sostenibilidad 2019-2024 de la Comisión Europea.